"Ama tu cuerpo porque vives en él”
Imagínate que en tu cuerpo hubiese 2 personas viviendo. Una es la mente y otra es el cuerpo mismo. Idealmente ambas deberían de ser amigas porque si están de pelea va a ser una situación muy difícil debido a que no pueden separarse ni por un instante.
Si estas dos "personas" viven en armonía pueden trabajar juntas para ser felices, porque la felicidad de una hace feliz a la otra. La infelicidad también se comparte.
Si mente y cuerpo se la pasan peleando están desperdiciando oportunidades y causándose daño mutua y constantemente. Es como dos adolescentes peleonas viviendo en el mismo cuarto. Imagínate si una de ellas empieza a destruirle la ropa a la otra y en venganza esta otra hace lo mismo. Es sabotaje constante y nadie gana.
Si estas dos "personas" viven en armonía pueden trabajar juntas para ser felices, porque la felicidad de una hace feliz a la otra. La infelicidad también se comparte.
Si mente y cuerpo se la pasan peleando están desperdiciando oportunidades y causándose daño mutua y constantemente. Es como dos adolescentes peleonas viviendo en el mismo cuarto. Imagínate si una de ellas empieza a destruirle la ropa a la otra y en venganza esta otra hace lo mismo. Es sabotaje constante y nadie gana.
En África muchas mujeres quieren ser más blancas, lo mismo sucede en Perú y otros países de Latino América como si para ser bella hay que ser blanca, esto es un mito. En los países orientales como Corea algunas mujeres desean que sus ojos sean menos orientales y se operan para cambiarlos, lo irónico es que siguen viéndose orientales. Otras mujeres se sienten gordas y están súper flacas cayendo en enfermedades como la anorexia y la bulimia.
El hacer paz con nuestro cuerpo libera energía que puede ser usada en otras cosas como mejorar nuestra mente y cuerpo y crecer como personas.
Al amar nuestro cuerpo somos capaces de verlo en forma objetiva y podemos cambiar algunos atributos, aceptamos el resto y le sacamos partido a lo que tenemos.
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